sábado, 21 de diciembre de 2013

Diferencias y similitudes entre híbridos de maíz para grano y para silaje de planta entera

El mejoramiento de maíz para silaje es específico y se lo aplica de esa manera en Europa, principalmente en Francia y Holanda. En USA y en nuestro país ha habido intentos de efectuar una selección específica, aunque ha prevalecido la selección para grano y la derivación o utilización de híbridos doble propósito, grano o silaje, lo que ha determinado que los mejores híbridos para silaje de planta entera sean los híbridos graníferos correctamente evaluados y destacados por la aptitud silera de la planta completa. Esta situación, lejos de ser criticable, es la que mejor ha respondido a las necesidades crecientes de silajes en los sistemas ganaderos. Es una realidad que todavía falte mucha difusión y avances en lo referido a los silajes, desde la elección de un híbrido adecuado, pasando por el manejo agronómico del lote y terminando por el momento de picado, la confección y el suministro. De todos esos puntos, a mi criterio, donde más se ha avanzado es en la disponibilidad de contratistas con maquinaria de última generación para el picado y para la confección del silo. La CACF (Cámara Argentina de Contratistas Forrajeros) ha contribuido a eso y a mucho más en aspectos como la formación permanente de sus asociados, la caracterización y relevamiento de diferentes situaciones que se generan desde el norte argentino hasta el sur de la Región Pampeana cada año, incluyendo el muestreo y análisis del forraje. Ese relevamiento ha dejado también en evidencia las fallas y limitantes que se observan por lo realizado en el cultivo antes del picado. Y sigue habiendo muchas prácticas no recomendables, que se efectúan después de la confección del silo. Con respecto al suministro, hay maquinaria adecuada y disponible, su adopción es menor a la aconsejable y en ese aspecto el auto-consumo ha tomado una importancia inimaginable hace pocos años y ha permitido a muchos productores, aún con manejos imperfectos y cantidades y calidades deficientes, apreciar las ventajas del silaje como técnica de conservación y se ha convertido en la mejor herramienta para la adopción e incorporación permanente al sistema de producción.

   Yendo a las diferencias y similitudes entre híbridos de maíz para grano y para silaje de planta entera, haré una breve síntesis cronológica considerando aspectos agronómicos, de origen genético y de evolución de los híbridos de maíz disponibles en Argentina:

    El secado rápido de la espiga, el ajuste de los ciclos o grado de precocidad, y la estructura de la planta fueron características de enorme importancia en el mejoramiento de maíz para grano, que sumado a innumerables estudios ecofisiológicos en líneas e híbridos de maíz para eficiencia fotosintética y acumulación y translocación de fotosintatos, determinaron el logro de mejores híbridos graníferos que colocaron al maíz como el cultivo de mayor ganancia genética en los últimos 30 años. El germoplasma explorado y utilizado fue parte de la estrategia para lograr los mayores rendimientos con híbridos más estables. Se cambió gradualmente el tipo de híbrido comercial, con predominancia de híbridos dobles y de tres líneas al comienzo arribando a nuestros días con predominancia de híbridos simples. Desde el punto de vista del silaje, los transgénicos con resistencia a insectos permitieron la amplitud de la ventana de siembra y la posibilidad de ensilar tanto maíces de siembra temprana, intermedia o tardía y por ende lograr las toneladas de materia seca de planta entera planificadas en forma segura y a menor costo.

    En el párrafo anterior consideramos la evolución y los logros en el cultivo del maíz. Sin embargo, desde el punto de vista del maíz para silaje, la evolución menor mencionada con respecto a la producción de grano tiene dos componentes claramente comprobables, que los mencionaré pero sin extenderme porque excede el objetivo de esta entrega:

        1) Se ha dedicado muy poca atención o directamente no se han tenido en cuenta las tecnologías disponibles como el uso de criterios de selección para silaje o de análisis de laboratorio o utilización de animales en el proceso selectivo. Se reemplazó por análisis y ensayos  de Universidades y de INTA, generalmente "a posteriori", es decir con el híbrido granífero ya obtenido. Esa estrategia contribuyó igualmente a un avance, aunque en grado menor que para grano. Permitió además, instalar discusiones y comprobar que las diferencias existían, como lo demostraron Gallais y Barrière en Francia desde hace más de 40 años y lo veníamos pregonando Bertoia y el suscripto hace más de 22 años. 
      2)  La influencia del marketing de las empresas semilleras, con la exaltación de características aisladas y de poca relación con la producción de rumiantes para algunos híbridos, en general con poca o nula base tecnológica o solamente con denominaciones comerciales más relacionadas a creencias, usos antiguos de maíces forrajeros o directamente aludiendo a nomenclatura no muy correcta aunque impactante, más que a sus características o aptitudes sileras. A juzgar por la aptitud silera de muchos híbridos recomendados para silaje desde hace tres décadas, o la base tecnológica existente no fue considerada o se eligieron por algún criterio que desconozco. Lo que sí puedo afirmar es que esas son las causas del menor avance del maíz para silaje que para grano. Siendo el maíz la especie mejor adaptada para ensilar y con una proporción de grano alrededor del 40% de la materia seca total, el avance logrado ha sido igualmente significativo y comprobable, pero debido más al avance genético del maíz granífero que a criterios y acciones más específicas
    Mientras tanto, con más o menos diferencias o más o menos similitudes entre ambos tipos (graníferos y sileros)  el silaje de maíz de planta entera avanza en Argentina y el uso potencial, si se incentiva la producción y exportación de carne y leche, puede demandar una superficie cercana a los 2 millones de hectáreas con más tecnología y mayor calidad del silaje. 
    

jueves, 12 de diciembre de 2013

Nomenclatura: Silo - ensilaje - ensilar - ensilado - silaje - planta entera

Para que todos hablemos de lo mismo cuando hacemos referencias a la terminología utilizada con las especies para ensilar o en los procesos para picar, conservar y suministrar el forraje obtenido y conservado, haremos una breve reseña de la nomenclatura adecuada, ya que es bastante común, sobretodo en procesos de desarrollo, promoción o marketing de las empresas proveedoras del sector, un uso inadecuado de la terminología:

SILO: recipiente que contiene a la planta picada y compactada en condiciones anaeróbicas. Puede ser un silo aéreo de material como se utilizaban a principios del siglo XX y que aún persisten como los de La Martona en Vicente Casares, prov. de Bs. As. Silos subterráneos y silos puente, ambos con compactación con tractores o maquinarias pesadas que en algunos casos pueden tener paredes laterales de material y que para producir la fermentación anaeróbica deben ser cubiertos por mantas de polietileno y coberturas extras para evitar voladuras de las mantas. Finalmente, el silo bolsa especialmente desarrollado para ensilar con dimensiones y estiramientos del material plástico para favorecer la compactación y la eliminación del aire en grandes volúmenes de forraje. Todos esos tipos descriptos o cuando se hace referencia a los mismos, deben ser denominados SILO en singular o SILOS en plural. Resumiendo el SILO tanto para grano como para forraje es el recipiente que contiene y etimológicamente en agronomía significa "granero subterráneo"

ENSILAR (sin. ENSILAJE, ENSILADO): se refiere al proceso de picar una planta entera, transportarla hasta el silo, compactar, tapar o cerrar. El agregado suplementario de inoculantes, granos o cualquier otro producto en el proceso deberá ser considerado como parte del mismo. Ensilado, además de asociarse al proceso también se lo utiliza como adjetivo. Ejemplo: maíz ensilado.

SILAJE: Es el producto (el forraje fermentado listo para suministrar a los rumiantes) que se ha hecho fermentar en un recipiente (SILO) que mantuvo la anaerobiosis. Frecuentemente se lo denomina también ensilaje o ensilado y es aceptada esa denominación si se está haciendo referencia al producto (forraje fermentado). Por ejemplo haciendo referencia a "ensilaje de maíz" o "maíz ensilado". Lo que siempre está mal expresado es referirlo con el término "silo". Es muy común denominar "Maíz Silo", cuando se quiere referir a "maíz para silaje", "ensilaje de maíz" o "planta entera de maíz para silaje" entre otras denominaciones adecuadas y precisas. Es más, hay híbridos de maíz recomendados para ensilar o con aptitud silera que en la denominación se antepuso la palabra silo. Es una denominación errónea que seguramente tiene algún componente de marketing y poco de conocimiento tecnológico específico, aunque generalmente se subsana con la mención de "silero", otra posibilidad de referirse a un maíz para silaje de planta entera. La denominación planta entera lo diferencia del ensilaje que se puede hacer del grano húmedo de maíz cuyo producto es "silaje de grano húmedo" o "grano húmedo ensilado" que nutricionalmente no tiene diferencias importantes con el grano seco incorporado a la dieta.

        

viernes, 6 de diciembre de 2013

Costos, planificación y tipos de forrajes conservados

El pasto, los silajes y los henos: 

los alimentos para rumiantes  de menor costo

   Aunque los principios que controlan la alimentación de los bovinos evolucionan constantemente, sigue siendo primordial no olvidar que la vaca es, en primer lugar y sobre todo un rumiante, es decir, un herbívoro que es el huésped de una multitud de microorganismos (bacterias, protozoos y hongos) capaces deteriorar la celulosa y la hemicelulosa. Imaginando una evolución en la ganadería y una complementación con la agricultura para hacerla más sustentable y más armoniosa entre los sistemas productivos y la población, la transformación de los forrajes por los rumiantes (un alimento indigesto para el hombre y otros monogástricos) en carne y leche, forma parte de la sustentabilidad, brindando excelentes fuentes de nutrientes para el ser humano (adaptado de Robert Berthiaume, Symposium sur les bovins laitiers CPAQ, 1998). Justamente los tres alimentos mencionados en el encabezamiento como de menor costo son ricos en fibras y otros nutrientes, contribuyen además a la sustentabilidad por la complementación agricultura / ganadería por el reciclado de nutrientes, la estabilidad en la producción animal y el manejo más adecuado de las pasturas.
   Según lo expresado en el párrafo anterior, los componentes básicos de las dietas de rumiantes son los pastos, los henos y los silajes. Los granos y algunos otros suplementos energéticos o proteicos son también necesarios para animales de mayores requerimientos, pero en una proporción suplementaria de los anteriores y se los denomina genéricamente concentrados. Éstos, nunca deberán reemplazar a los tres alimentos básicos mencionados. Si los reemplazan o se utilizan en exceso, lo que falla es la planificación en el establecimiento con el agravante de que el costo de alimentación será sensiblemente mayor.
   Hasta ahora hemos considerado las particularidades de los herbívoros rumiantes y remarcado dos aspectos básicos en la alimentación de rumiantes de carne y leche: el costo por kilogramo de Materia Seca (MS) digestible y la planificación para tener toda la MS necesaria, de la mejor calidad posible y en el momento adecuado. Estos conceptos son básicos y aplicables a las pasturas para pastoreo directo o henificación, a los cultivos para henificar y a los cultivos para ensilar.
   Cuando remarcamos MS digestible es sólo con la finalidad de darle mayor importancia a producir más y de más calidad nutritriva. Y con la presión de la agricultura que desplaza a la ganadería a suelos con limitantes edáficas físicas y de nutrientes, que deben producir más forraje por unidad de superficie, se plantea la necesidad de tener silajes en suelos agrícolas, con la mayor producción y calidad posibles en un corto período de tiempo para poder justificar el uso del suelo agrícola para la ganadería. Es más, en un futuro cercano los suelos agrícolas deberán proveer forrajes (mayormente silajes y henos de calidad) a los sistemas ganaderos de carne y leche y los sistemas agrícolas deberán utilizar los residuos ganaderos para hacer más sustentable los sistemas intensivos de producción de carne y leche. Actualmente, y salvo excepciones, los sistemas ganaderos intensivos cumplen poco y nada los principios de sustentabilidad ambiental  ya que desde la contaminación de napas hasta la emisión de componentes volátiles de todo tipo y olores desagradables poco se ha hecho aunque exista tecnología disponible que contribuye al mismo tiempo a la sustentabilidad y a la rentabilidad de los sistemas productivos de carne y leche. El costo de un sistema sustentable puede ser un poco más elevado, pero es sustentable. En cambio hoy existen sistemas llamados de bajo costo, no sustentables, que si se les exigiera cumplir principios y normas serían mucho más costosos o simplemente inviables.
   Una forma de disminuir costos es recurriendo a forrajes conservados obtenidos de cultivos de ciclo corto y crecimiento rápido como la Moha (Setaria italica), que es un verdeo de verano caracterizado por el corto período desde la siembra hasta su aprovechamiento (60-75 días). Su amplia ventana de siembra (de octubre a febrero) se complementa con la alta adaptación a distintos ambientes y condiciones productivas que resultan limitantes (ej. déficit hídrico) para otros cultivos de verano. En sistemas intensivos de producción de leche o engorde de vacunos se utiliza para la confección de heno, uso habitual también en campos de cría y para la vaca seca del tambo. Sus principales aportes son en fibra efectiva y en materia seca energética, de calidad mediana a buena dependiendo del estado fenológico en el que se efectúe el corte para henificar.
   Planificando la confección de silajes se pueden asegurar alimentos energéticos de bajo costo relativo, conservando la calidad de la materia seca obtenida en el momento del corte por varios meses y aún años. La planificación de las necesidades de los forrajes a conservar es imprescindible en los sistemas intensivos. El silaje, permite además que los excedentes que se generen puedan ser conservados de un año para el otro. Es más, hasta puede ser una rutina para cubrir períodos de malas condiciones climáticas, asegurar el equivalente a las necesidades de un año extra de silaje, porque el tipo de conservación lo permite y porque su costo financiero es bajo y sensiblemente menor a cualquiera de las alternativas disponibles. 
   Como alimento proteico ya sea de la pastura o como forraje conservado se dispone de la alfalfa. Conviene remarcar aquí, que las especies tradicionales y más aptas para henificar y ensilar, son respectivamente, la alfalfa y el maíz. La alfalfa produce un heno de alta calidad con volúmenes medios por corte y contenido proteico medio a alto. Ya vimos otro heno con la moha y su principal ventaja por su ciclo corto y crecimiento rápido, sumado a su amplia ventana de siembra. El maíz, por su parte, produce un silaje altamente energético con calidad media a alta y  grandes volúmenes en corto tiempo. Considerando el desplazamiento de los sistemas ganaderos por el avance agrícola a suelos de menor aptitud, el sorgo para ensilaje complementa al maíz. Los cuatro cultivos mencionados en este párrafo (alfalfa, maíz para silaje de planta entera, moha y sorgo para silaje de planta entera) son los principales tipos de forrajes conservados para henificar y ensilar.
          En síntesis, la utilización de los distintos tipos principales de forrajes conservados deberán ser rigurosamente planificados, obtenidos con el uso de la tecnología disponible incluyendo los mejores cultivares y fertilización, para producir materia seca forrajera de las mejores calidades y menores costos posibles.

miércoles, 27 de noviembre de 2013

Forrajes Conservados

HenSilAR   Henos y Silajes para Argentina
      Ing. Agr. Pedro RIMIERI (M.Sc., Dr.) primieri730@gmail.com
El objetivo de este BLOG es demostrar
la importancia estratégica
en los sistemas de producción de carne y leche
de los Forrajes Conservados
para lograr altas producciones a bajo costo
No consideraremos detalladamente ni la nutrición ni los inoculantes, ya que ambos temas están ampliamente desarrollados, con muy buen nivel técnico, en otros ámbitos.
Nos centraremos en germoplasma, cultivares y paquetes tecnológicos que aseguren producción potencial y calidad en sistemas de producción de Argentina

Haremos una síntesis de la importancia estratégica
de los Forrajes Conservados
en los sistemas de producción de carne y leche
y periódicamente agregaremos artículos de opinión o comentarios puntuales y actuales para mantener el BLOG actualizado.
Comenzaremos con una mirada a los Sistemas de Producción con Henos y Silajes (Forrajes Conservados, FC) y sus combinaciones
Hay tres grandes grupos de Sistemas*:
  1. en pastoreo (continuo y rotativo) con suplementación
  2. en pastoreo (eventual-horario) con suplementación
  3. en sistemas de encierro simples hasta llegar a confinamiento con dietas TMR
*Hay muchos más sistemas y combinaciones; pero estos incluyen suplementación y dietas TMR con FC
Demostraremos que sin Forrajes Conservados
                         no logramos el potencial  de producción
                                          a bajo costo en ninguno de los Sistemas.

Próxima entregaCostos, planificación y tipos de forrajes conservados